A medida que aumenta el uso de la tecnología en el entorno laboral, se redefinen las habilidades necesarias para mantenerse activos. Las habilidades de autogestión como el aprendizaje activo, la resistencia, la tolerancia al estrés y la flexibilidad son ahora prioritarias.
La pandemia aceleró lo que ya se veía venir: la migración en el desempeño laboral y la aproximación a una quinta revolución industrial. Esto ha obligado a los directivos de las empresas a poner el foco estratégico en el desarrollo de nuevas habilidades, las cuales permitan construir equipos de alto rendimiento con apertura y flexibilidad para adaptarse a las exigencias de los nuevos escenarios.
Según el Informe sobre el Futuro de los Empleos del Foro Económico Mundial, el 50% de todos los empleados necesitarán volver a formarse para el 2025 debido al creciente aumento de adopción del uso de la tecnología de vanguardia y la automatización de procesos. De hecho, cada seis meses alrededor del 40% de los trabajadores requerirá una recalificación para ver si pueden continuar con su trabajo.
Según el WEF (World Economic Forum), los vertiginosos cambios implicarán que en torno al 2025, 85 millones de los trabajos actuales desaparecerán. La buena noticia es que se crearán 97 millones de puestos nuevos gracias al cambio tecnológico. “Tenemos las herramientas a nuestra disposición. La abundancia de la innovación tecnológica que define nuestra era actual puede aprovecharse para dar rienda suelta al potencial humano”, ha declarado el presidente ejecutivo del WEF, Klaus Schwab.
Sus conclusiones coinciden con algunos otros pronósticos: McKinsey & Company estima que 375 millones de trabajadores necesitarán aprender nuevos conocimientos y habilidades antes de 2030 para continuar insertados en el mundo laboral. Y la Unesco, según el portal Cienciaenchile.cl, estima que para el 2050, el 75% de los trabajos requerirán habilidades relacionadas con la ciencia, tecnología, ingeniería y las matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés), una categoría en la que las mujeres están en clara desventaja, pues solo una de cada cuatro mujeres estudia dichas carreras.
La situación en América Latina y el Perú es preocupante, pues existe un déficit de profesionales preparados en estas carreras, pero también se vislumbra como una oportunidad si se empieza a trabajar en la re-educación de la mano de obra. Valga recordar que, en el Perú, este año, ocho de cada diez empresas han tenido dificultad para encontrar personal con talento digital, es decir personal preparado para el uso de las nuevas tecnologías.
El informe del WEF establece que, este nuevo panorama de exigencias laborales implicará no solo aprender sobre el uso de las innovaciones tecnológicas y las profesiones emergentes, sino el desarrollo de habilidades transversales particulares. Ellos establecen una lista de diez habilidades que deberá tener el trabajador del 2025. Estas son:
- Pensamiento Analítico e Innovación: la capacidad de analizas las situaciones y encontrar soluciones innovadoras para aplicar de forma eficiente es lo más importante. Es una habilidad que ya ocupaba el primer lugar en la encuesta pasada.
- Aprendizaje Activo y Estrategias de Aprendizaje: la capacidad de introducir nuevos conocimientos al ritmo que requiere el negocio y ponerlos en práctica es crucial en un entorno como el actual.
- Resolución de Problemas Complejos: los cambios generan nuevas complicaciones para las que se requiere la habilidad de darles solución atendiendo a las condiciones particulares que estas implican.
- Pensamiento Crítico y Análisis: es decir, usar el razonamiento para interpretar la abundante data y llegar a una conclusión.
- Creatividad, Originalidad e Iniciativa: La creatividad es una de las soft skills más valoradas en la actualidad. No se necesita aplicar soluciones viejas y desgastadas para problemas nuevos. En el 2015 estaba en el décimo lugar.
- Liderazgo e Influencia Social: esta habilidad permite motivar al grupo, lo cual es clave para tener éxito en los procesos de transformación cultural que conllevan los nuevos tiempos.
- Uso, Seguimiento y Control de la Tecnología: los trabajadores de todos los sectores necesitan familiarizarse con la tecnología y los beneficios que les pueden ayudar a lograr en sus roles. Esto es esencial, pues el 84% de las empresas está preparada para acelerar su digitalización a raíz de la pandemia.
- Diseño y Programación de Tecnología: se estima que los roles que se espera que sean los más buscados son los de diseño y programación. La comprensión de las ventas y promociones en línea será clave en dicho camino.
- Resiliencia, Tolerancia al Estrés y Flexibilidad: es decir habilidades propias del concepto de inteligencia emocional.
- Razonamiento, Resolución De Problemas e Ideación: absorber la mayor cantidad de conocimiento permite idear y desarrollar salidas a las complicaciones con nuevas ideas.