El lunes 20 de enero, cuando Donald Trump asumió el cargo como presidente de los Estados Unidos, la presencia de los grandes líderes del mundo tecnológico no pasó desapercibida. Más allá de los cientos de memes que circularon en las redes sociales, lo cierto es que estaban en primera fila Elon Musk, Mark Zuckerberg, Jeff Bezos y Sundar Pichai, entre otros.
Lo usual es que esté primero el gabinete, pero en esta oportunidad los multimillonarios se sentaron muy cerca del escenario, algo fuera de lo tradicional. Y aunque Trump dio a entender que no recibirían un trato preferencial, era claro su apoyo al nuevo gobernante y se generaron muchas expectativas entre los comentaristas del evento.
Si solo hubiera sido ésto lo sucedido, habría quedado en lo anecdótico. Bastaba sumar las cuentas bancarias de los ahí presentes para entender que son quienes más dinero manejan en Estados Unidos. Pero no fue solo eso lo llamativo. Poco después Trump anunció que financiaría un enorme proyecto para impulsar la inteligencia artificial (IA).
Se trata de Stargate, un nuevo proyecto tecnológico para promover infraestructuras de inteligencia artificial. Según informaron, permitirá crear unos 100 mil empleos y potenciar la inversión en inteligencia artificial en Estados Unidos. La inversión inicial es de US$100 mil millones, pero se calcula que llegará a US$500 mil millones en cuatro años.
El presidente de Estados Unidos anunció que estas inversiones permitirán construir centros de datos e infraestructura energética para que su país supere las demandas relacionadas con el desarrollo de tecnología IA.
Stargate es un proyecto consensuado entre varias grandes empresas tecnológicas, entre ellas OpenAI (creadora de ChatGPT) y Oracle. Microsoft, ARM o NVIDIA también trabajarán como socios tecnológicos clave en el proyecto. Tienen el apoyo de SoftBank, una compañía de inversiones japonesa y MGX, una empresa de inversión en inteligencia artificial árabe. Masayoshi Son, CEO de SoftBank, será el presidente de Stargate.
El fin de semana previo a la toma de posesión el aplicativo dejó de funcionar. Pero poco después de su toma de posesión, el presidente Trump firmó una orden que retrasaba la prohibición de TikTok por 75 días y propuso una participación del gobierno de EE. UU. en la aplicación.
El primer centro de datos se montará en Texas, detallaron, y servirá de apoyo para los proyectos que usan IA en el país. Sam Altman, director ejecutivo de OpenAI, aseguró ante la prensa internacional que se vienen cosas buenas y asombrosas, aunque aclaró que todavía no hay una IA general todopoderosa. «Los fanáticos deben reducir sus expectativas unas 100 veces», dijo.
Te bloqueo, pero no te bloqueo
El drama de las tensas relaciones con China no estuvo ausente esta primera semana de la administración Trump. Como se recordará, el Tribunal Supremo de Estados Unidos prohibió de manera temporal el uso de TikTok, propiedad de la empresa china ByteDance. Ellos confirmaron la ley que prohibía su empleo en el país a menos que fuera vendida a capitales norteamericanos antes del 19 de enero.
El fin de semana previo a la toma de posesión el aplicativo dejó de funcionar. Pero poco después de su toma de posesión, el presidente Trump firmó una orden que retrasaba la prohibición de TikTok por 75 días y propuso una participación del gobierno de EE. UU. en la aplicación.
El presidente de Estados Unidos anunció que estas inversiones permitirán construir centros de datos e infraestructura energética para que su país supere las demandas relacionadas con el desarrollo de tecnología IA.
Horas después del anunció, TikTok comenzó a restaurar el servicio, pero aún no se podía descargar de las tiendas de aplicaciones. Los usuarios que ya lo tenían instalado pudieron continuar haciendo uso de ella, pero solo de manera temporal, hasta que se arregle la situación.
El caso tiene varios meses de desarrollo. En abril del 2024, el Congreso aprobó la citada ley basado en argumentos de seguridad nacional y ByteDance interpuso una demanda judicial apelando a los derechos de los 170 millones de consumidores.
Impacto bursátil
Como es de imaginar, los vaivenes políticos propios del cambio de mandatario tienen una influencia en el valor de las acciones de las grandes tecnológicas. Desde antes de asumir Trump, al conocer que había ganado, los analistas internacionales pronosticaron una mejora para algunos grupos.
Ya sea por cambio en la política de aranceles o por medidas proteccionistas, se espera una mejora en el valor de las acciones de los grandes actores, como Nvidia, Microsoft o Apple. En el caso de Elon Musk, quien ha apoyado abiertamente al mandatario, se observó una mejora al cierre del 2024 (acciones subieron 14%). Sin embargo, el reciente anuncio relativo a un retroceso en los subsidios a los autos eléctricos podría afectar a Tesla, que en la última semana ha experimentado una baja en el valor de sus acciones.
Nada está dicho o definido aun, pero es claro para los analistas internacionales que este será un periodo con cambio en las políticas aplicadas a la industria local y el comercio exterior, lo cual tendrá efectos de considerable impacto en el mercado. Un periodo interesante se avecina y la expectativa es grande.