Durante Conecta Perú 2025, realizado en la primera semana de noviembre, diversos especialistas coincidieron en la necesidad de desregular el sector, ofrecer incentivos para la inversión y potenciar más la compartición de infraestructura. El foro reunió a más de 400 ejecutivos de alto nivel, incluyendo operadores, entidades reguladoras, organismos gubernamentales, analistas y proveedores con el objetivo de analizar los desafíos y oportunidades que modelan el panorama digital de Perú y la región.
Reconocieron que se han implementado medidas regulatorias para facilitar el cumplimiento de compromisos de inversión en 5G y reducir la sobrerregulación tanto en conectividad móvil como en internet residencial, pero todavía se necesita continuar trabajando en flexibilizar más la regulación y pasar de la teoría a la ejecución concreta.
Infraestructura por aprovechar
Virginia Nakagawa, exviceministra de Comunicaciones y consultora regulatoria/árbitra en Kaiteki Regulación, subrayó la necesidad de diseñar fuentes de financiamiento público que mantengan el valor y permitan seguir invirtiendo en la conectividad rural. En la actualidad, explicó, tenemos dos redes muy robustas, la Red Dorsal (13 500 km de fibra óptica), que conecta las capitales de provincias y los proyectos regionales (casi 30 000 km de fibra), desplegados en sitios totalmente alejados, y se requiere una buena ecuación entre el sector público y privado para maximizar su uso.



César Huamán, gerente general de InterNexa, destacó la necesidad de flexibilizar las condiciones que existen para sacar provecho a la Red Dorsal y establecer reglas claras para fomentar la colaboración público-privada y acelerar la conectividad en instituciones públicas. Cuando esas bases son sólidas y estables, el compromiso del sector privado se mantiene. «Deberíamos poder utilizar la infraestructura que ya existe del Estado con mecanismos mucho más ágiles», remarcó. Y si el Estado no puede realizar o mantener un proyecto con recursos propios, entonces que lo saquen a concurso directo para los operadores interesados, añadió.
«Como Internexa estamos dispuestos a ayudar y ser un socio estratégico para el Estado y contribuir a la inclusión digital. En el caso de la Red Dorsal podríamos evaluar la posibilidad de operarla, mantenerla en el largo plazo, siempre que se den unas condiciones muy claras para que pueda autosostener de una manera eficiente», señaló César Huamán.
Desregular y mirar a futuro
Los expositores reconocieron que hay avances en la desregulación, pero también muchos pendientes. Resaltaron, por ejemplo, la reciente decisión de establecer una regulación diferenciada entre abonados corporativos y residenciales como un primer paso, pero se consideraron que se requieren medidas regulatorias más fuertes.
«La primera condición para un ambiente regulatorio eficaz es que los funcionarios que están al frente tengan estabilidad laboral y autonomía técnica».
Pedro Betancur, vicepresidente de asuntos externos, económicos y regulatorios de DirectTV
Nino Boggio, gerente central de Legal, Regulatorio y Relaciones Institucionales de Entel Perú, reconoció los avances, pero advirtió que «no es suficiente, porque todavía existen asimetrías estructurales». Como ejemplo citó que los creadores de contenido incrementan el tráfico en las redes de los operadores móviles, pero esto no necesariamente viene acompañado de ingresos que garanticen la infraestructura necesaria y adecuada para poder este prestar servicios a los clientes de manera eficiente. El sector enfrenta el reto de ser sostenible, es decir, de mantener las inversiones necesarias para reducir la brecha digital y sostener la competencia en un entorno de alta demanda, márgenes ajustados y presión regulatoria. «Esa asimetría debería ser considerada por los reguladores», dijo.
A su turno Pedro Betancur, vicepresidente de asuntos externos, económicos y regulatorios de DirectTV, advirtió que falta mayor confianza en el entorno regulatorio, estabilidad política y autonomía técnica de los funcionarios. Se necesita modernizar el marco regulatorio y eliminar cargas regulatorias desproporcionadas, dijo. «Nuestro ambiente regulatorio es razonable, pero hay características esenciales a cualquier marco regulatorio eficaz que en el Perú se han distorsionado. La primera condición para un ambiente regulatorio eficaz es que los funcionarios que están al frente tengan estabilidad laboral y autonomía técnica», dijo Betancur.
Explicó que, además de haber asimetrías regulatorias por normas que son «del tiempo del cobre», hay asimetrías relacionadas con las empresas que operan formalmente y las piratas. Lo que se necesita, remarcó Betancur, es un regulador con una visión moderna, enfocado en la reconstrucción del marco regulatorio.






