Gracias a la labor del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), órgano regulador del sector en México, entre los años 2013 y 2023, los mexicanos se ahorraron más de US$40 mil millones, se dio una caída del 32.1% en los precios de las comunicaciones y cerca de 51 millones de mexicanos se sumarán al servicio de Internet, informó el diario El Economista.
Además, la población con 6 años o más que utiliza el Internet en México pasó de 61.4 millones (57.4%) en 2015 a 97 millones (81.2%) en 2023, mientras que el volumen de los no usuarios de Internet continúa a la baja, con una tasa de reducción anual de 11.1%, llegando a 22.5 millones. Y el número de personas que no usan el Internet porque no tienen acceso pasó de 5.2 millones en 2015 a 2.6 millones en 2023, reportó Prensario Internacional.
No obstante, el organismo regulador, una entidad con cerca de 1,500 empleados y US$88 millones como presupuesto anual de 2024, estaría con los días contados y podría desaparecer. La iniciativa fue remitida al congreso por Andrés Manuel López Obrador, cuando era presidente y es respaldada por la actual presidenta Claudia Sheinbaum, quien tiene mayoría en el palacio legislativo y ha asumido el mando del país este 1 de octubre del 2024.
Mientras se decide la medida, un legislador del partido de gobierno ha lanzado otra propuesta con la cual buscan restarle algunas funciones al IFT y asignarlas a otros organismos del Ejecutivo en 2025.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) ha pedido a las autoridades mexicanas que analicen con detenimiento la decisión de desaparecerlo. Los precios bajaron gracias a sus políticas regulatorias a favor de la competencia, al tiempo que en el mercado surgieron mejores ofertas de planes y servicios, sustentaron. «Por cada peso que se le asigna al IFT para realizar sus funciones, este órgano autónomo regresa 44 pesos en beneficios a las personas usuarias», expuso el organismo autónomo a la prensa de su país.
Según informaron los diarios El Economista y Expansión, el IFT fue la autoridad que dividió a Telmex en dos y le brindó libertad tarifaria a la compañía. Además, ordenó la venta de Fox Sports; vio que AT&T venda su participación en Sky; declaró dominantes a Televisa y Megacable en televisión de paga y se negó a una concesión de televisión para América Móvil.
Desde que se creó el IFT se han sucedido múltiples licitaciones, incluyendo las de recursos para 4G y 5G, que han generado grandes beneficios para la población. Antes, cuando no existía el IFT, solo hubo dos asignaciones de espectro en 25 años.
Nicolás Lucas-Bartolo, periodista especializado en el sector, explicó que otro de los riesgos de su desaparición es que las licitaciones de espectro ya no sean por concurso, sino asignaciones directas, a discreción del ejecutivo. Desde que se creó el IFT se han sucedido múltiples licitaciones, incluyendo las de recursos para 4G y 5G, que han generado grandes beneficios para la población. Antes, cuando no existía el IFT, solo hubo dos asignaciones de espectro en 25 años.
Lucas detalló que en la actualidad la propuesta de desaparecer el IFT y delegar sus funciones a otras entidades no autónomas ya pasó a la cámara de diputados y se encuentra en la de senadores. Luego irá a los congresos locales o regionales, que son 32 y si se aprueba en 17 queda lista para ser promulgada y entrar en vigor al día siguiente, o en otra fecha si así lo indica la norma en su texto.
El caso argentino
La pronta desaparición del organismo encargado de regular las telecomunicaciones no es una preocupación exclusiva del pueblo mexicano. Argentina también está viviendo un caso semejante. El presidente Javier Milei ordenó la desaparición del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) a fines del 2023 y luego la postergó para julio del 2025, porque se entendió que se necesitaban 18 meses y no un semestre para liquidarlo.
La prensa local ha informado que el Enacom tenía un presupuesto de alrededor de US$7 millones y hasta el cierre del primer semestre del año han cerrado una treintena de sus delegaciones en el interior de Argentina.
El organismo depende de la Jefatura de Gabinete de la Presidencia argentina y fue creado en 2015 para ser la autoridad reguladora de las telecomunicaciones. El gobierno ha dispuesto su intervención porque consideran que así se generarían ahorros en recursos públicos y se desregulará el sector de telecomunicaciones, principalmente los precios de telefonía, banda ancha y televisión de paga.
La prensa local ha informado que el Enacom tenía un presupuesto de alrededor de US$7 millones y hasta el cierre del primer semestre del año han cerrado una treintena de sus delegaciones en el interior de Argentina. Eso ha significado el despido de 300 empleados, aunque algunos calculan que son en realidad unas 500 plazas laborales suprimidas. El Enacom habría tenido a inicios del 2024 unos 2,000 empleados.
La disposición de Milei incluyó designar como interventores a personas muy familiarizadas con el Enacom y sus predecesores, AFSCA y COMFER. El organismo estratégico ha funcionado simultáneamente como regulador, controlador y financiador de políticas. Ellos están estudiando su estructura para la respectiva reorganización operativamente, incluyendo evaluar la ejecución de los fondos del servicio universal (que financia obras de conectividad provinciales). Las funciones serán asignadas a otras entidades del Estado.