De acuerdo a las predicciones de la consultora IDC, en el 2023 tomará impulso el modelo -as-a-Service para software, infraestructura, redes y otros. La brecha de talento será más evidente, sobre todo por el auge del uso de la Inteligencia Artificial, entre otras tecnologías de vanguardia.
La bola de cristal que permite ver el futuro inmediato no existe, pero los analistas de IDC nos ofrecen una mirada clara sobre lo que se espera prime en la demanda y oferta tecnológica, tanto para el 2023 como para los años siguientes. En el presente artículo les ofrecemos un resumen de lo que han previsto.
La era del servicio
Desde hace varios años se escucha hablar de un incremento de la alternativa SaaS (software como servicio, por sus siglas en inglés), que luego se trasladó a un plan de cobro por IaaS (infraestructura como servicio) NaaS (redes como servicio), etc. Para este año, IDC estima que estos modelos seguirán al alza y para el 2028 el 35% de las propuestas de conectividad, seguridad, cómputo y activos de datos para las empresas de la región, usarán modelos as-a-Service. Además, establece que el 25% de la infraestructura de hardware se comprará bajo dicha modalidad en el año que se inicia. La consultora incluso establece que el 40% de las inversiones en infraestructura y software serán frenadas en el mediano plazo por la incapacidad de predictibilidad de los costos en proyectos futuros.
Nubes en abundancia
Sin duda el 2022 fue el año de las nubes híbridas y el 2023 continuará la tendencia al alza, pero con una mayor adopción de nubes públicas. De hecho, el gasto en tecnología se elevará más que el PBI, tanto en Latinoamérica como en Europa. La consultora precisa que la primera prioridad de inversión indudable será el paso de la cloud híbrida a la nube pública. El 56% de las organizaciones europeas, añaden, demandan soluciones para observar la red de extremo a extremo a través de cloud y entornos multicloud.
Soluciones inteligentes
La automatización y el empleo de soluciones inteligente capaces de aprender de forma autónoma se mantendrá al alza, pese a que en la plana laboral sigue existiendo temor al cambio. La consultora considera que, para el 2027, el 50% de las empresas más grandes de América Latina continuarán enfrentando riesgo material debido a la falta de disposición de los trabajadores. Es por eso que las empresas deben trabajar en generar confianza en los sistemas de tecnología autónomos y las aplicaciones inteligentes, además de involucrar a sus socios tecnológicos en dicho proceso. IDC habla de desarrollar la “visión de máquina” como una capacidad empleada al trabajar un nuevo producto o servicio, combinando las experiencias físicas con digitales, productividad, eficiencia, gestión y comunicación con las diferentes líneas de negocio.
Soberanía de los datos
IDC estima que estamos pasando de la soberanía de los datos a la soberanía digital en forma veloz y para el 2026 cambiarán los procesos operativos de más del 30% de los activos del área de tecnología y datos. Esto generará retos normativos, porque la regulación ha de irse adaptando a estas nuevas tendencias imperantes. En este sentido cobra relevancia desarrollar la gobernabilidad de los datos, la resiliencia cibernética y sostenibilidad (impacto en el medio ambiente) a mediano y largo plazo.
Aplicaciones y plataformas todo en uno
Gartner, otra consultora, ha hablado ya de una tendencia al desarrollo de “superaplicaciones” o “superapps”, una evolución natural del mercado digital de aplicaciones. Se trata de una especie de plataforma todo en uno, que ha pegado en Asia y América Latina. Un ejemplo es la colombiana Rappi, donde no solo hay delivery sino también acceso a créditos, por ejemplo. Esto supone suprimir la necesidad de descargar otras aplicaciones. A eso apuntan algunas nuevas opciones locales como Agora. Complementario a ello, IDC nos habla de mayores desafíos en la creación o implementación (a través de proveedores tecnológicos) de plataformas internas que soporten las nuevas demandas que generan todo este cúmulo de aplicaciones.
Sostenibilidad
La sostenibilidad es cada vez más relevante en todas las industrias y está directamente relacionada a la digitalización. IDC España estimó que en el 2024 el 80% de las grandes empresas capturarán sus datos de carbono e informarán de su huella de carbono a nivel empresarial utilizando métricas cuantificables, en comparación con el 50% actual. En 2026 se considerará entre uno de los tres principales factores de decisión para la compra de equipos informáticos y más del 50% de las licitaciones incluirán métricas relativas a las emisiones de carbono, el uso de materiales y las condiciones laborales. En nuestra región las proporciones serán menores, pero sin duda también seguirán una curva ascendente.
Más inversiones y más expertos
Todos los analistas coinciden en la mayor demanda de expertos en el manejo de nuevas soluciones (Web3, Blockchain y el Metaverso), tanto a nivel global como regional. El gasto mundial en transformación digital durante 2022 creció 17,6% respecto al 2021 y continuará a un ritmo similar el 2023. Para el 2023, el 90% de las organizaciones en todo el mundo priorizarán las inversiones en herramientas digitales y para 2025, el 60% de las organizaciones adoptaran un enfoque basado en la automatización, los centros de excelencia (COE) y las plataformas Low Code y No Code, señalaron. A nivel de mano de obra existirán 2,5 millones de roles emergentes para el 2026, lo que implicará actualizaciones constantes ante una preocupante falta de personal calificado. Estiman que para 2026, las deficiencias en la creación de habilidades críticas y los escasos esfuerzos de capacitación evitarán que el 70% de las empresas obtenga el valor total de las inversiones en nube, datos y automatización. Y para el 2027 habrá 320 lanzamiento de productos digitales retrasados.