Desde 2014, cada 23 de junio se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Mujer en la Ingeniería o Women’s Engineering Society (WES). Es una ocasión para reconocer y celebrar los logros de las mujeres en la ingeniería, así como para promover la igualdad de género en este campo, que surgió en el Reino Unido con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Las carreras ligadas a la ingeniería han sido socialmente relacionadas a los varones a lo largo de los años, pero gracias a múltiples esfuerzos eso ha ido cambiado en los últimos tiempos. En el Perú, según un informe de la Unesco del 2018, el porcentaje de mujeres que son egresadas de la carrera de ingeniería alcanzó el 47.5% del total de profesionales. Esto quiere decir que casi la mitad de los ingenieros en Perú son mujeres. Sin embargo, este porcentaje disminuye al medir su presencia en el campo laboral: según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en el 2024 solo el 24% de los profesionales activos en ingeniería son mujeres.





A nivel de elección de la carrera de ingeniería entre las jóvenes se observan avances. La Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) determinó que crece 5% el número de estudiantes mujeres al año. Y un estudio de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu) del 2020, difundido en 2024, ha determinado que el 36.3% de las carreras demandadas en el mercado están ligadas a la ingeniería.
La ingeniería informática, aclararon, presenta una menor participación femenina y aun se deben vencer estereotipos para lograr una mayor participación. Según Sunedu, solo 7.5% prefieren la carrera de ingeniería de sistemas y computación.
A pesar de lo alentador de estas cifras, aún existe en el país una gran parte de la población femenina que no ha podido terminar sus estudios secundarios o primarios por tratar de ayudar económicamente a su familia en las zonas rurales. Según el Banco Mundial, el índice de deserción escolar en niñas es mucho más alto que el de sus contrapartes varones en el mundo, incluyendo nuestro país.
En el Perú, según un informe de la Unesco del 2018, el porcentaje de mujeres que son egresadas de la carrera de ingeniería alcanzó el 47.5% del total de profesionales. Esto quiere decir que casi la mitad de los ingenieros en Perú son mujeres.
A su vez, según un reporte de la Unesco las niñas tienen más dificultades para recibir educación y son más propensas que los niños a no asistir a la escuela desde los grados de primaria. A escala mundial, hay 127 millones de niñas sin escolarización.
En otro informe el organismo advierte que muchas niñas se ven frenadas por prejuicios, normas sociales y expectativas que influyen en la calidad de educación que reciben y las materias que estudian. Esta disparidad de género es pronunciada en la enseñanza de las ciencias, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas (STEM) a las mujeres y, según la Unesco, es preocupante, porque afecta el proceso de innovación de todo un país, el bienestar social, el crecimiento inclusivo y el desarrollo sostenible.
Otro gran reto pendiente es la igualdad salarial, no solo en la ingeniería, sino en todas las profesiones a las que acceden las mujeres. Según el INEI, hasta marzo de este año las damas ganaban 24.1% menos que los hombres, pese a que han tenido un incremento salarial mensual promedio del 6%.