Perú registró un aumento de consumidores por Internet en 2020, pasando de tener una presencia del 18,6% al 36,1%. Tendencia al alza se vivió en toda latinoamericana.
El 2020 quedará en los registros como el año en que irrumpió una pandemia global. El mundo se paralizó y la vida de las personas se vio profundamente alterada de forma inesperada. Este fenómeno, que continúa presente, puso a prueba la capacidad de adaptación a nuevos escenarios y muchas rutinas sufrieron cambios a partir de las medidas dictaminadas para prevenir el contagio del COVID-19.
“Es así que en el marco de lo que se conoce como la nueva normalidad, surgen modificaciones en la manera de comprar de las personas, nuevos hábitos propios de un nuevo tipo de consumidor latinoamericano cada vez más digital, que le dedica más tiempo a la investigación previa a la decisión de compra, y todo a través de internet sin moverse de su casa”, asegura Rodrigo Armayor, director de operaciones de Leadaki, agencia especializada en estrategias full funnel en medios digitales, certificada en Google Marketing Platform.
Solo en Latinoamérica, el comercio electrónico creció más del 300% durante el brote de COVID-19, de acuerdo a un estudio realizado por Kantar: “Termómetro del consumidor 2020”. De este informe se desprende que el 37% de los usuarios latinoamericanos online del último año, se considera un comprador digital nacido durante la pandemia.
Si bien el principal motor para este cambio de hábito fue reducir las salidas y recibir el producto en el domicilio, según el sondeo, el 17% de ellos asegura que encuentran los productos más rápidamente online que en las tiendas físicas. Otro dato para destacar es que, desde el inicio de la pandemia, el 52% de los compradores en línea en Latinoamérica están realizando más compras por internet que en tiempos de prepandemia y casi la mitad de latinoamericanos, más específicamente el 47% de ellos, realizó sus compras desde sus dispositivos móviles, según los resultados de Global Commerce Review, estudio elaborado por Criteo.
En Perú, de acuerdo a datos suministrados por la Cámara Peruana de Comercio Electrónico (CAPECE), el comercio electrónico creció un 50 % durante 2020. Este crecimiento también se ha reflejado en los consumidores a través de internet, dado que la penetración de compradores online en ese país pasó del 18,6% (6 millones) en el 2019 a 36,1% (11,8 millones) al cierre del año pasado. En consonancia con estos datos, con la llegada de la pandemia, también se advierte un incremento en el uso de los dispositivos móviles (66%) por parte de la población peruana. El mayor tráfico web se genera a través de teléfonos celulares.
“Estamos ante un consumidor latinoamericano cada vez más exigente, que cuenta con mayor conocimiento de las herramientas digitales, que explora y navega mucho más por internet. Todo esto hace que las personas descubran nuevas marcas y, lo que conocíamos como fidelización de marca, ya no es tan común. El público es más inestable, va cambiando y probando con distintos productos y servicios de acuerdo a sus necesidades, intereses y posibilidades”, comenta Rodrigo Armayor. Esto queda reflejado en los resultados del estudio “Experiencias Móviles 2020” de Kantar, que revela que en Latinoamérica el 62% de los compradores digitales durante la pandemia incursionó en nuevas marcas, y el 82% cree que seguirá adquiriéndolas.
Si bien algunas de las conductas asociadas a la pandemia fueron novedosas, la mayoría reflejaron una aceleración de tendencias ya identificadas. La adopción de ciertas tecnologías creció en pocos meses lo que le hubiera tomado años, y eso dio lugar a un aumento vertiginoso del comercio electrónico. Estamos en un cambio de paradigma donde la inversión en un marketing digital más inteligente es clave y esto es factible por medio de la omnicanalidad de la compra programática, donde todos los procesos y los diferentes actores de la publicidad digital -anunciantes, agencias, adservers, entre otros-, conjugan en un único canal automatizado, simplificando de esta manera el proceso y ahorrando tiempo y dinero”, afirma el director de operaciones de Leadaki.
“Además, por medio de su micro segmentación de audiencias, basadas en intenciones, comportamientos y acciones de los usuarios, permite identificar a los potenciales clientes más relevantes para que las marcas puedan llegar a sus potenciales clientes con el mensaje perfecto, a la persona correcta, en el momento ideal. Hoy, a través de la compra programática, tenemos la posibilidad de trabajar de forma controlada”, agrega.
Al poder visualizar los reportes en tiempo real, se accede a las métricas más importantes para cumplir los objetivos de la estrategia planteada, permitiendo la optimización de las campañas mientras están activas. De esta manera, se toma el control total sobre la inversión para obtener mejores resultados y retornos de inversión. “Los hábitos de los consumidores están cambiando, y es por eso que las estrategias de las empresas deben adecuarse a las necesidades de los usuarios para no perder relevancia ni clientes. Es el momento para comenzar a invertir en publicidad de una forma mucho más eficiente”, concluye Rodrigo Armayor.