Sebastián M. Cabello, experto en políticas de tecnología, señaló que estamos siendo testigos de una evolución del modelo de negocio de la infraestructura. Los inversionistas están poniendo foco en el despliegue de fibra y la consolidación a través de operadores neutros.
La cobertura de fibra óptica residencial (FTTH/B), es decir la cantidad de hogares que pueden contratar el servicio, viene creciendo en forma sostenida en América Latina y llegará a superar el 80% de la región para el 2027. Sin embargo, el uso de dicha tecnología alcanzará a superar la mitad de los hogares latinos recién en el 2026.
Así lo estimó Sebastián M. Cabello, experto en políticas de tecnología, ex director de GSMA y actual CEO de SmC+ Digital Public Affairs, durante su presentación en un webinar realizado por 5G Américas.
Según detalló, el 2022 cerramos con un 66% de cobertura y un 33% de penetración promedio en la región. Eso quiere decir que las suscripciones de FTTH/B crecieron un 24% al llegar a los 57 millones y los hogares que podrían contratar el servicio se elevaron un 12%, alcanzando los 115 millones. Para el presente año se espera llegar a 71% de cobertura y 39% de penetración.
Algunos países, como Chile y Brasil, tenían ya un 78% de cobertura en 2022 y un 43% y 45% de hogares suscritos, respectivamente, superando al promedio regional. Perú, junto a Colombia y Bolivia, están por debajo de la media latinoamericana, con 47%, 44% y 42% de cobertura, respectivamente. A nivel de penetración de suscriptores nuestro país y Colombia están en 15%, menos de la mitad del promedio, mientras que Bolivia llega al 21%.
La fibra se ha convertido en un elemento de suma importancia para brindar una conectividad robusta, soportar 5G y la evolución del Wi-Fi en la actualidad, destacó Sebastián Cabello. Eso ha conllevado una evolución en el modelo de negocio de infraestructura y un cambio de orientación de las inversiones.
Comentó que estamos siendo testigos de un giro en el accionar frente a las torreras [montan torres celulares] porque ahora se ve como una opción interesante de rentabilidad el tendido de fibra, que además es necesaria para conectar las antenas de 5G.
Evolución esperada de la cobertura y penetración del servicio de fibra óptica a nivel de hogares en América Latina:
Los operadores de telecomunicaciones, explicó, están entrando en un proceso de desintegración para ser más eficientes, desligándose no solo de torres celulares sino de la fibra óptica, como vienen haciendo América Móvil, el grupo Telefónica y Entel, que aún está pendiente de aprobación en Chile. Quienes lo adquieren pasan a crear otras nuevas empresas especializadas. El proceso incluye una consolidación de operadores chicos, que ofrecen el servicio de forma neutral.
Cuando se habla de neutralidad, aclaró, no se refieren a imitar los modelos aplicados en Colombia o México (Azteca), que eran redes estatales. Tampoco imitar el modelo peruano, que falló a pesar de ser subvencionado y tiene que resolver cómo se manejará la oferta para ser rentable. “Hoy es el gran momento de la fibra bajo un modelo comercial competitivo. Los operadores neutrales vuelven a ser una alternativa eficiente ante la desintegración vertical de los operadores”, afirmó.