Casi un cuarto de millón de personas del sector ha perdido su empleo en los últimos meses y, arrancando marzo, quebró el banco que financiaba a las startup en Silicón Valley.
El reciente anuncio del quiebre del banco que financia las innovaciones en Silicon Valley es solo la punta del iceberg. A las empresas de tecnología, grandes y pequeñas, no les faltan problemas económicos. Empezaron a fines del 2022 y para el 2023 solo se ha intensificado la crisis, lo que ha conllevado un alto número de despidos.
El viernes 10 de marzo una noticia remeció a los estadounidenses: el Silicon Valley Bank (SVB) quebró a una velocidad sorprendente. Ellos brindaban servicios a casi la mitad de las empresas en tecnología y respaldaban las inversiones de alto riesgo. El gobierno ha emitido el respaldo a los depósitos, pero eso no evita apuros financieros para las startups del valle.
Si bien el banco existe desde 1983, con la pandemia se incrementaron los movimientos en el SVB debido al impulso en la demanda de los servicios tecnológicos y digitales que generó el aislamiento. Según CNN, los activos del banco VSB pasaron de US$71 000 millones en el 2019 a US$220 000 millones a fines de marzo del 2022. Su planilla se duplicó y los depósitos pasaron de US$62 000 a US$ 198 000 en el mismo periodo.
El quiebre se produjo tras 48 horas de retiros frenéticos de depósitos. Pero el problema venía de años atrás, cuando subieron las tasas de la Reserva Federal y se elevaron los costos de los préstamos. Además, tuvieron dificultades para conseguir nuevos fondos, lo que generó más riesgos. Entonces, el miércoles 8 de marzo, cuando anunciaron que venderían acciones (que estaban de caída) para subastar sus finanzas, se dio la corrida y dos días después se fugó el capital. Las acciones del banco cayeron 60% el jueves y el viernes ya no se podía hacer mayor cosa, así que el gobierno estadounidense entró al rescate. En Gran Bretaña el HSBC intervino el lunes 13 para comprar la filial del SVB, asegurando los depósitos de miles de empresas.
Problemas entre los grandes
El error en cálculo generado por el tirón hacia arriba en la demanda de tecnología durante la pandemia ha generado daños, no solo a los pequeños emprendedores que se financiaban con el banco, sino a las grandes tecnológicas, que han optado por despidos masivos para evitar estados financieros en rojo. Hablamos de más de 250 mil desvinculaciones.
En sus discursos ante inversionistas es común oír explicaciones basadas en la falsa expectativa de que sería sostenible en el tiempo ese pico de demanda. Se calculó mal y, con el fin del aislamiento, la demanda se sinceró. Ellos mismos admiten que contrataron mucho personal y ahora deben prescindir de una parte de ese grupo. Eso es lo que ha motivado tantas desvinculaciones laborales.
La automatización de procesos y la llegada de ChatGTP también influyeron. Un Informe de Resume Builder señala que el 48% de los que lo usan han reemplazado personal por ChatGTP y el 33% de los encuestados dijo que está herramienta de Inteligencia Artificial “definitivamente” provocará el despido de más trabajadores para fines de 2023.
Según los reportes que se han hecho públicos, tenemos a gigantes como Meta, dueño de Facebook, que está despidiendo a 11 mil personas, el 13% de su personal, y a otros como Amazon, que han desvinculado al 8% de su planilla, es decir 18 mil trabajadores. A nivel de porcentaje el más grande es Twitter, que ha despedido al 50%, es decir 3700 personas.
Tal como se puede apreciar en el cuadro, hay ocho grandes empresas del sector que han despedido a más del 10% de su personal y otras siete que superan el 5%. Entre todas ellas estamos pasando los 120 000 trabajadores desvinculados. Pero el tijeretazo al empleo ya supera el cuarto de millón, según eldiario.es.
A finales del 2022 comenzó la oleada con más de 159 000 puestos de trabajo destruidos y en enero del 2023 se han batido todos los récords de recortes de plantilla, con otros 88 000 despidos anunciados solo en el citado mes. Según datos de Layoff.fyi fueron 241 empresas tecnológicas las que han despedido a casi 78 000 trabajadores al inicio del 2023 y en 2022 fueron 1040 firmas las que prescindieron de personal.
Los aumentos de personal en los años pandémicos fueron mayores a los despidos, valga aclarar. De 2021 a 2022 Microsoft, por ejemplo, había aumentado un 22% su número de empleados, mientras que Amazon lo hizo en un 62% y Meta un 30%. Dichas compañías están despidiendo menos del 20% de su planilla, eso quiere decir que contrataron más gente por perspectivas erradas del rumbo que tomaría el negocio, pero no todos los nuevos nuevos puestos salieron. Es una “corrección” del plan al no concretarse el crecimiento esperado, según Infojobs.
La mayoría de las empresas son de Estados Unidos, pero la ola de despidos también ha llegado a Europa, con compañías como SAP, Ericsson o Spotify. En Perú, sin embargo, un informe del diario Gestión reveló que la situación es diferente y las grandes compañías tecnológicas, cómo Google, incluso han estado contratando más personas.