Bajo el marco del proyecto LUPIC, la Universidad Nacional de Ciencia y Tecnología de Seúl (SeoulTech) implementará tres laboratorios de entrenamiento en ataques y defensa. Taeho Jung, director del proyecto, afirmó que será un espacio donde los estudiantes podrán aplicar sus conocimientos sin restricciones.
En enero del 2019, cuando la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI) y la Universidad Nacional de Ciencia y Tecnología de Seúl (SeoulTech) firmaron un Memorando de Entendimiento para promover la mutua cooperación en educación tecnológica, la intensión de abrir un departamento de ciberseguridad quedó clara. Tres años después, en agosto del 2022, la UNI recibía a sus primeros alumnos de su nueva carrera de Ingeniería de la Ciberseguridad.
La colaboración no se queda, sin embargo, en la creación de una especialidad exclusivamente dedicada a la evaluación y gestión de los riesgos informáticos de la red. El proyecto Leading University Project for International Cooperation (LUPIC) es ejecutado con la participación del INICTEL-UNI e incluye la implementación de dos laboratorios de guerra cibernética en la universidad y uno en las instalaciones del Inictel.
Este mes se anunció el inicio del montado de los laboratorios, los cuales estarán listos para el 2024 y serán empleados por la primera promoción de ingenieros de ciberseguridad de la UNI, que estarán graduados para el 2026. Se trata de un espacio controlado que permitirá a los estudiantes ensayar vectores de ataque y defensa para frenar riesgos causados por el cibercrimen sin poner en riesgo la infraestructura de la universidad, porque están desconectados del “mundo real”.
Taeho Jung, director del proyecto LUPIC, declaró a eBIZ durante su reciente visita al país que este CyberRoom será un espacio para aplicar los conocimientos sin restricciones, porque se harán simulaciones fuera de la red. “En la universidad uno aprende mucha teoría, pero en el mundo real, en el campo laboral, hay mucha diferencia entre la teoría y la práctica. Por eso necesitan practicar en un entorno bien controlado en el que puedan desarrollar todas sus habilidades y aplicar el conocimiento teórico”, explicó.
En el laboratorio los estudiantes toman el rol de atacante (ofensiva) o defensor y viven situaciones similares a las reales que experimenta un banco, un gobierno o una empresa en la vida real. “Ellos acceden al sistema como si fueran un hacker de verdad atacando un sistema informático, pero sin causar problemas a ninguna infraestructura real, porque si no eso sería contra la ley”, aclaró.
Con esta labor se espera revertir el déficit en personal preparado para ciberseguridad del país, añadió. El Perú está en el puesto 86 en el ranking de ciberseguridad de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y una de las brechas o deficiencias por superar es la de la capacitación en la materia. “Todos los países tienen que estar preparados. No se trata solo de algo que afecta a Rusia y Ucrania, que están en conflicto, sino que involucra a todos los países. Se requiere una respuesta como país multidisciplinaria y la capacitación es una manera de prepararse para hacerle frente”, comentó.
“Los estudiantes accederán al sistema como si fueran un hacker de verdad atacando un sistema informático, pero sin causar problemas a ninguna infraestructura real, porque si no eso sería contra la ley”
El Gobierno, las instituciones académicas y la empresa deben colaborar y trabajar estrechamente para dar a un país la protección de los ataques cibernéticos, añadió Eduardo Rodríguez, líder del proyecto en Perú (Inictel-UNI), quien consideró esta iniciativa como una muestra de que dicho trabajo coordinado y secuencial es posible.
“Ahora que se está trabajando en el Gobierno Digital y se están dando un conjunto de procedimientos para mejorar el proceso de la transformación digital, tener personal especializado en ciberseguridad es indispensable”, agregó Taeho Jung.
En Corea, comentó, la formación se da tanto en el pre y post grado universitario porque existe una consciencia sobre los riesgos a los que están expuestos los ciudadanos, empresas y organizaciones gubernamentales. A nivel escolar no hay un programa en sí de ciberseguridad, pero sí orientación sobre la importancia del tema.
En nuestro país, como parte de sus actividades del proyecto LUPIC, los universitarios de ambas casas de estudios capacitaron este mes a estudiantes de tercero a quinto de secundaria en materia de ciberseguridad y la cultura coreana. Además, un alumno de pregrado y un futuro doctor han realizado un viaje a la universidad coreana para estudiar allá, detalló Rodríguez.
